domingo, 25 de noviembre de 2012
Habrá muchos que piensen que el hecho de hacer una película basada en un libro ya le otorga a dicho libro cierto prestigio, o al contrario, es a la película al que se le concede ese reconocimiento. Pero ni lo uno ni lo otro pueden ser afirmados con rotundidad, pues hay pésimos libros de los cuales se han sacado pésimas películas, y pésimas películas sacas de grandes libros. Está claro que de un libro deplorable no se puede hacer una buena película, a no ser, que esta sea transformada totalmente hasta el punto de sólo haber tomado una pequeña idea de tal libro.
Tampoco la fama de un libro le adjudica a su escritor una reputación adecuada, pues todos sabemos lo que vende, y lo que vende es lo de siempre, típicas historias de amor con finales felices y más de lo mismo, que al fin y al cabo parten siempre de la misma idea. Estos libros a los que se les han otorgado el puesto de best-sellers no merecen ni el mínimo reconocimiento, y no por el hecho de contar siempre las mismas historias, si no, por hacerlo mal, el que un libro sea el más vendido no significa que su escritor sea el mejor del mundo, es todo lo contrario, a veces resulta que es pésimo en su oficio. Así que, POR FAVOR!!!! Aprended a ser un poquito más críticos con lo que leáis y no os guiéis por la opinión pública, que no sólo en estos temas, lleva muchas veces a denominadores comunes que hacen que todos sigamos los mismos patrones, sin dejadnos reflexionar sobre otros temas, atrapados en un bucle infinito.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)